En consonancia con lo que ocurrirá a nivel empresarial, la sección
sindical de UGT en BMN se integra con la de Bankia el 30 de noviembre.
Es momento de hacer un pequeño balance, y también de hacer una apuesta
por el futuro que se nos presenta lleno de retos y logros por conseguir, pero
también de obstáculos.
Dejamos atrás una etapa muy difícil. Hemos sido trabajadores de un banco gestionado por una gerencia que en muchas líneas se ha manifestado incompetente para lo que tenía entre manos, y que ha consolidado el mal hacer que ya les “encumbró” en las respectivas cajas. El resultado, ya lo sabemos. Y el peaje que todos nosotros hemos tenido que afrontar, también. Han sido años de reestructuraciones muy dolorosas y de negociaciones muy difíciles en una empresa con los recursos bajo mínimos.
UGT, como sindicato mayoritario en BMN, ha tenido la responsabilidad
de liderar la negociación de los acuerdos que han logrado mantener la gran
parte de nuestras condiciones laborales en un escenario tan difícil. Hicimos
una homologación salarial sin traumas; tenemos un gran plan de Igualdad; y el
mejor acuerdo sobre horarios del sector financiero, aunque ahora vamos a una
entidad donde en ese tema entramos perdiendo, gracias a los acuerdos que el
hasta ahora mayoritario CCOO, junto a ACCAM, han firmado permitiendo todos los
horarios que la empresa ha querido y puede que alguno más; eso sí, para
supuestos “voluntarios siempre” (perdón por la ironía). También hemos pasado
por tres reestructuraciones con sus correspondientes ERE, en los que la
situación de partida había empeorado, gracias a esa dañina Reforma Laboral y a
que BMN cada vez los afrontaba en más estado de necesidad y menos recursos.
No obstante y echando la vista atrás, podemos afirmar que UGT ha
negociado ERE en BMN en mejores condiciones que las demás entidades en su
situación.
En el último teníamos sobre la mesa una cifra mareante de despidos, y UGT aportó siempre sus mejores armas: paciencia, negociación tirando hasta la última fibra de la cuerda, y uso de todas las medidas paliativas utilizadas con éxito por UGT en otras empresas y sectores: suspensiones, excedencias, reducciones de jornada… además se le impidió a la empresa que denegara las solicitudes de salida -salvando un cupo mínimo-, o que los forzosos pudieran ser señalados “en barra libre”. Gracias a todo ello, se ha conseguido mantener la mayor parte del empleo, que siempre es nuestra prioridad. Nada que ver con otros ERE, donde se denegaron a saco las salidas de quienes las pedían y despedían forzosamente donde, cuando y a quien querían.
En el último teníamos sobre la mesa una cifra mareante de despidos, y UGT aportó siempre sus mejores armas: paciencia, negociación tirando hasta la última fibra de la cuerda, y uso de todas las medidas paliativas utilizadas con éxito por UGT en otras empresas y sectores: suspensiones, excedencias, reducciones de jornada… además se le impidió a la empresa que denegara las solicitudes de salida -salvando un cupo mínimo-, o que los forzosos pudieran ser señalados “en barra libre”. Gracias a todo ello, se ha conseguido mantener la mayor parte del empleo, que siempre es nuestra prioridad. Nada que ver con otros ERE, donde se denegaron a saco las salidas de quienes las pedían y despedían forzosamente donde, cuando y a quien querían.
Nos integramos con UGT-Bankia, donde se va a apostar por la
continuidad de nuestra línea de trabajo. Nuestro nuevo secretario general de la
UGT-Bankia integrada será el compañero Jesús Vázquez, que ya lo era en BMN.
Varios compañer@s también de BMN se integrarán, junto con los compañeros de
Bankia en el nuevo equipo de trabajo.
UGT, desde esta posición, va a trabajar y negociar como viene haciendo
para preservar al máximo el empleo y los centros de trabajo. Para que la
reestructuración que viene sea ajustada en número y bien dotada económicamente.
Que sea para voluntarios, que éstos se puedan ir siempre antes de acudir
a forzosos, y que la empresa no tenga “barra libre”. Para que todas las medidas
sean compensadas adecuadamente y atiendan a criterios y necesidades objetivas;
y que no sean usadas como amenaza, venganza o despido encubierto. Desde estos
planteamientos, UGT-Bankia se sumará o intentará articular mayorías. Fuera de
ellos, no estaremos nunca.
Preservar empleo y condiciones laborales es nuestro axioma. Negociar
hasta el final con firmeza y sin descanso será nuestra arma. La plantilla,
todos vosotros, nuestra fuerza. Ese es nuestro compromiso y será nuestra línea.
Y desde la que intentaremos, en un futuro próximo y con vuestra confianza, ser
la primera fuerza sindical de Bankia.